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- Malformaciones congénitas
- Las malformaciones congénitas o de desarrollo
en la cavidad bucal generalmente poseen una fuerte tendencia genética.
El labio y paladar hendido, se encuentran entre las anomalías congénitas
más frecuentes en el hombre, la gravedad de la deformación es tal que
hace difícil el correcto tratamiento de los maxilares, dientes y oclusión.
Anomalías como disostosis cleidocraneal, tortícolis, Síndrome de Down,
parálisis cerebral, entre otras, producen alteraciones en el crecimiento
de los maxilares y por lo tanto, anomalías dentarias y de la oclusión
principalmente.
- Epidemiología
- Los estudios epidemiológicos sobre defectos
congénitos reportan un importante número de alteraciones bucales en
la oclusión, debido a la discrepancia severa entre el tamaño de los
maxilares y los dientes ocasionados por hábitos de presión anormal.
- Panorama Internacional
- Un estudio realizado en Barcelona, en 92 pacientes
con síndrome de Down de 1 a 20 años informó que en 100% de los casos
se presentó una o más anomalías oclusales, la maloclusión más frecuente
fue la Clase III y más de 50% de la muestra presentó hábitos bucales.
En general se presentó un índice de maloclusión de 1.85% lo que indica
presencia de anomalías de la oclusión de moderada a grave. Contrario
a esto, en la ciudad de Puebla se realizó un estudio en 97 neonatos
que tenían una edad promedio de 12.6 días, quienes presentaron un tipo
de anomalías que se consideran inocuas, pero que es importante considerar
su presencia por su alta frecuencia, en el grupo estudiado; 72.17% presentó
alguna anomalía, siendo las más frecuentes los nódulos de Bön, seguidos
de las perlas de Epstein y de los quistes de la lámina basal. También
en esta muestra se encontraron siete casos de labio y paladar hendido.
Un estudio realizado en 30 pacientes con parálisis cerebral en la ciudad
de México con un rango de edad de 15 a 31 años, reportó un alto riesgo
de padecer maloclusiones y la de mayor frecuencia fue la Clase II. Asimismo
se revisó el reporte de un caso de disostosis cleidocraneal con signos
importantes a nivel esquelético, facial y bucal con ausencia de dientes,
mordida abierta anterior, prognatismo mandibular, relación de Clase
III molar de Angle, dientes supernumerarios y retenidos. Lo que indica
una gran cantidad de afecciones bucales que demandan atención para este
defecto congénito. Se revisó el reporte de un caso con microsomía hemifacial,
malformación craneofacial más común, después del labio y paladar hendido
y se presentó con laterognatismo, desviación del mentón y retrognatismo.
- Panorama Nacional
- En 2581 consultas realizadas a discapacitados
mentales, entre los que se encontraban pacientes con: retardo mental,
parálisis cerebral infantil, retraso psicomotor, síndrome de Down e
hiperquinesis, en la ciudad de México. Se presentó con mayor frecuencia:
inclusión dental, anquiloglosia, caries múltiples, focos sépticos, fibrosis,
absceso apical y mucocele. Se reporta un estudio del ISSSTE en la ciudad
de México, de 18 pacientes con edad promedio de 4.3 a 5.3 meses de edad
con labio y paladar hendido donde se observó predominio de labio hendido
en el primogénito y mayor frecuencia del lado izquierdo. Respecto a
la etiología se observa una mayor frecuencia de factores ambientales.
- Conclusiones
- Estos estudios epidemiológicos dan cuenta de
la severidad de las manifestaciones bucales que se presentan, aunadas
a los defectos congénitos, los cuales deben ser diagnosticados y atendidos
por los dentistas, por lo que es importante que éstos tengan conocimientos
sobre las afecciones bucales que son necesarios tratar en estos casos
y ofrecer a la población una buena calidad de la atención en la resolución
de sus problemas.
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