OBJETIVOS MECÁNICOS DE SCHILDER
Schilder enseñó a operar los conductos en tercera dimensión, mediante la aplicación de cinco objetivos mecánicos para tener éxito en la limpieza y conformación:
- Desarrollar una forma cónica afilada y continua en la preparación del conducto radicular. Excavar y preservar la forma natural del conducto. Principal ventaja, la obturación, los principios hidráulicos y la limpieza.
- Estrechar el conducto en el ápice, con la sección transversal más estrecha en el CDC. La única excepción es un diente con reabsorción interna o con una protuberancia inusual en la forma natural del conducto.
- Realizar la preparación en múltiples planos. El sellado tridimensional del punto de salida es la ventaja de este objetivo.
- Nunca transportar el foramen.
- Mantener el foramen lo más pequeño que resulte práctico.
ir a INICIO |