ROENTGENOGRAFÍA
DIGITAL EN ENDODONCIA (Cohen 12 ed. Chapter 2) (Basrani 2nd. ed., Chapter 4)
(RADIOVISIOGRAFÍA)
La radiografía digital ha estado en el mercado odontológico desde los 1980s, y recientemente ha sido mejorada y popularizada con mejores elementos e interfases más amigables. Tiene la habilidad de capturar, visualizar, magnificar, mejorar y almacenar imágenes radiográficas que pueden ser fácilmente reproducibles y que no se degradan con el paso del tiempo.
Sin embargo, la mayoría de los dentistas, aún en países desarrollados, no hay abandonado la radiografía convencional y muchos cuestionan la necesidad para el cambio.
A mediados de los 90 la
baja resolución de estos sistemas limitó en gran medida su aplicación en
odontología. Sin embargo al final de la década los avances tecnológicos
supusieron una drástica mejora en las posibilidades diagnósticas de estos
sistemas de radiología digital.
Hoy en día estos avances incluyen la
simplificación tanto de los aparatos como de los programas informáticos a
los que van asociados, una rápida obtención de la imagen radiográfica,
grandes prestaciones en el tratamiento de dichas imágenes y, en definitiva,
mayores comodidades tanto para el dentista como para el paciente. De este
modo la aceptación de la radiología digital ha ido creciendo en el mundo de
la odontología y cada año son más los profesionales que deciden incorporar
esta tecnología en sus clínicas.
La radiovisiografía (RVG, Trophy) fue uno de los primeros sistemas, después se convirtió en «imagen visiografía» gracias a la aparición de otras técnicas (como la laservisiografía) que han ido evolucionando el diagnóstico por la imagen. Se ha querido utilizar la RVG para detectar detalles tales como conductos laterales y accesorios, pero la capacidad de los medios para ese objetivo es baja. Igualmente se ha comparado con diferentes películas radiográficas en la conductometría, y los resultados son semejantes en cuanto a la calidad de la imagen obtenida con ambas técnicas
|
|
|
 |
|
 |
La radiografía digital no utiliza películas de rayos X y no requiere el proceso de revelado y fijado. En su lugar se utilizan sensores que capturan la imagen creada por la fuente de rayos X. Este sensor está directamente o inalámbricamente conectado a una computadora, que interpreta la señal y, utilizando un programa especializado, traduce la señal en una imagen de dos dimensiones que puede ser proyectada en un monitor, mejorada y analizada. La imagen puede ser almacenada en el expediente del paciente y en un ambiente compartido, ser recuperado cuando sea necesario.

La calidad diagnóstica de esta tecnología ha mostrado ser comparable con la radiografía convencional basada en película. La interpretación de una radiografía digital puede ser subjetiva, similar a la de una película convencional.
El examen de una radiografía digital en un monitor de alta resolución permite una interpretación más rápida y fácil, tanto para el cínico como para el paciente. La imagen aparece casi instantáneamente sin distorsión potencial de la imagen por revelado y fijado inadecuados. El clínico puede magnificar diferentes áreas de la radiografías y puede mejorar la imagen para revisar mejor ciertas estructuras anatómicas, en algunos casos, la imagen puede ser incluso coloreada lo cual puede ser una herramienta útil para educación del paciente.
ir a INICIO |